Con una simple sonrisa o a través de un cajero imaginario… Sí, así de moderno está el ecosistema de los métodos de pago alrededor del mundo. Y es que cada vez son más las empresas que, a raíz de la transformación digital y los avances de la tecnología, han podido idear o incorporar nuevos sistemas que pretenden facilitar las transacciones. Conozcamos algunos de estos en este nuevo artículo de blog. 

No es secreto que el efectivo está casi desapareciendo. O quizá no del todo, pero al menos en nuestro imaginario existe esa posibilidad. De hecho, escribimos sobre esto en otro artículo titulado: “La crisis del efectivo: Por qué los billetes podrían convertirse en reliquias”. 

No hay duda de que la digitalización financiera está avanzando como nunca.El portal de estadística mundial Statista estima que para este año 2022, el valor total de los pagos digitales alcanzará más de 8 billones de dólares. Comparemos esta cifra con la que se estimaba para el 2017: 3,3 billones de dólares. Muchísimo más, ¿cierto? 

Tendencias en pagos 

Según un estudio realizado por la empresa tecnológica Accenture, la pandemia del Covid-19 “nos alejó del dinero en efectivo e incluso de las tarjetas de crédito”. El mismo estudio indicó que los pagos sin contactos, es decir, no presenciales, crecieron un 150% desde 2019. ¿Y cuáles son los métodos que revolucionan el mercado? 

• Billeteras virtuales: servicio que permite realizar pagos (transferir dinero, pagar servicios, comprar en comercios, etc) de forma 100% digital a través de aplicaciones móviles. 
• PayPal: sistema de pago mundial para pagar de forma electrónica por internet. 
• NFC: los pagos a través de la tecnología NFC (Near Field Communication) permiten hacer pagos sin necesidad de contacto, es decir, solo se necesita acercar la tarjeta o el dispositivo a un lector para que este lo reconozca y se produzca el cobro. 
• Sistemas biométricos: sistema de pago que se basa en la información biométrica de una persona, como su huella digital, voz o por medio de reconocimiento facial. 

Ahondemos un poco en este último. 

Podría bastar con solo una sonrisa

Los reconocimientos faciales o la huella digital no son una tecnología nueva si pensamos en cómo desbloqueamos la mayoría de los teléfonos hoy en día. O, incluso, estos métodos se usan para entrar a algunas aplicaciones, como lo que ocurre con algunos bancos en línea. Pero una cosa es acceder a través del reconocimiento facial, y otra muy distinta es que a través de este puedas zanjar una compra en cuestión de segundos. 

Espera, ¿cómo? Tranquilo, te explicamos. 

La empresa multinacional de servicios financieros Mastercard Inc anunció el lanzamiento de una nueva tecnología para realizar pagos usando una sonrisa o un gesto de la mano como confirmación. 

La idea de este método es que las personas registren su gesto e información de pago en una aplicación, para luego hacer una compra automáticamente a través del gesto facial elegido. Algunas de las empresas involucradas en este lanzamiento son PayFace, NEC, Aurus, POP ID, entre otras. 

• Ir a una tienda y salir sin pagar

¿Cómo es eso de ir a una tienda, agarrar tus productos e irte sin pagar? Bueno, este formato comenzó con Amazon, a través de su marca Amazon Go: un supermercado donde, a través de un código QR asociado a una cuenta y método de pago en Amazon, puedes llevarte los productos “sin pagar”. 

Para esto, utilizan una tecnología llamada Just Walk Out, creada por la misma empresa. La idea de este sistema es que las personas eviten filas y puedan comprar de forma expedita. En la tienda todo está controlado por sensores y cámaras que rastrean los movimientos del comprador y los productos que toma.

Este sistema de Amazon fue probado por primera vez en 2018 en Seattle, y desde entonces algunas empresas como Ghop en España, Mighty Al y 7 Eleven en Estados Unidos, se han inspirado en el concepto para ofrecer compras fáciles y rápidas. 

Desafío a futuro: la seguridad 

Como es de esperar, todos estos nuevos métodos de pago, especialmente aquellos más rupturistas, traen consigo nuevos desafíos que hay que considerar. Uno de ellos, y quizás el más relevante, es el de la ciberseguridad. Es obvio y esperable sentir miedo ante la idea de que tan solo con un gesto facial se descuente plata de tu cuenta bancaria. Lo mismo puede ocurrir con el uso de datos, ¿qué tanta información mía pueden utilizar las empresas? 

Estas interrogantes a veces se ven resueltas con herramientas y tecnologías que buscan proteger a los clientes, tales como un proceso de autentificación e identificación potente, el cifrado de datos o el bloqueo de pagos sospechosos. En nuestro artículo de blog “Ciberataques: la nueva amenaza tras la digitalización'' hablamos de esto en  profundidad. Si lo quieres leer, pincha aquí. 

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