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Breve introducción a las transferencias internacionales

Hacer una transferencia bancaria hoy es tan común como hace 20 años lo era firmar un cheque o pagar en efectivo. Transferir dinero entre personas o a empresas se ha vuelto parte de nuestro día a día, aunque nos encontremos en extremos opuestos del globo terráqueo. El volumen de transferencias de fondos nacionales e internacionales ha crecido exponencialmente en la última década, de la mano de la revolución Fintech y el paso a la banca digital. 

Según el Banco Mundial, el volumen de envíos internacionales de remesas llegó a $689 billones de dólares en 2018, un 10% más que en 2017, y así ha seguido aumentando sostenidamente en los últimos años. Enviar dinero a otro país hoy es muchísimo más simple que hace unas décadas, pero es necesario que comprendas el proceso que hay detrás y conozcas las principales diferencias que hay con una transferencia nacional. 

Las transferencias nacionales son aquellas que se realizan entre cuentas del mismo banco o entre distintos bancos del mismo país; estas suelen ser inmediatas y sin comisiones. Así, si transfieres a las 12:17, a las 12:18 el dinero aparece en la cuenta del destinatario y sin costo alguno: si envías $20.000, tu destinatario recibirá esos mismos $20.000.

Las transferencias internacionales, en cambio, son más lentas que las anteriores, pues requieren que el dinero pase por distintos intermediarios, como bancos, agencias u otras empresas especializadas, antes de llegar a destino. El costo que tendrá ese envío al exterior dependerá principalmente de dos factores:

1. La comisión: cobro que hace el banco de origen, el de destino y los intermediarios por la gestión del envío de dinero.

Cuando el envío de dinero se hace a través de la red SWIFT, la comisión puede ser asumida por quien envía el dinero, por quien lo recibe o por ambos, dependiendo de la modalidad que escojas. 

-Modalidad OUR: todos los gastos de transferencia son asumidos por la persona que envía el dinero.

-Modalidad SHA: la persona que envía el dinero costea la comisión del banco emisor y el resto de las comisiones se descuentan del monto enviado.

-Modalidad BEN: el destinatario asume todos los costos de la operación y se descuenta del monto enviado.

Así, a diferencia de lo que sucede en una transferencia nacional, el monto enviado no será necesariamente el mismo que recibirá el beneficiario en el país de destino. Si envías $20.000 con un 10% de comisión por la transferencia, tu destinatario recibirá $18.000.

Si bien durante mucho años el medio tradicional para realizar transferencias internacionales ha sido a través del sistema Swift, actualmente hay alternativas, como Currency Bird, que trabajan en conjunto con una red de bancos y partners, para poder hacer los pagos de forma local en cada país y disminuir las comisiones.

2. El tipo de cambio: esto es el indicador fijado por el mercado que marca el valor de una moneda respecto a otra. Puedes consultarlo en el sitio web del Banco Central, en Google o en sitios especializados en conversión de divisas como XE.

Es importante tener en cuenta que no todas las entidades que realizan transferencias se rigen por este tipo de cambio “oficial”, por eso siempre debes cotizar directamente con quien planees enviar tu dinero, ya que puedes tener que considerar un costo extra al momento de transferir con algunos bancos o agencias.

En CurrencyBird estamos permanentemente generando nuevas alianzas con partners internacionales para poder efectuar pagos de forma local y minimizar así el costo de tus transferencias. Compruébalo y cotiza con nosotros aquí.